Los ejemplos más antiguos de la historia de la hidroponía se remontan a los jardines colgantes de Babilonia y los jardines flotantes de China. Los seres humanos utilizan estas técnicas hace miles de años. Aunque la teoría general detrás de hidroponía sigue siendo el mismo, la tecnología moderna nos ha permitido cultivar las plantas de forma más rápida para que sean más resistentes y más saludables.
En pocas palabras, la hidroponía es la práctica de las plantas en crecimiento, utilizando solamente agua, nutrientes, y un medio de cultivo. La palabra hidroponía proviene de las raíces “hidro”, que significa agua, y “ponos”, es decir, la mano de obra, este método de jardinería no utiliza el suelo. No es tan “high-tech” como mucho creen y la verdad es que esta tecnología de cultivo ya existe desde hace muchísimos siglos.
Beneficios de la hidroponía
Una de las mayores ventajas que la hidroponía tiene en comparación con el cultivo común es la conservación del agua. Cuando se cultiva plantas en el suelo, un cultivador tiene que ser muy experimentado para saber la cantidad de agua que le da a sus plantas. Si les da demasiado las raíces de la planta no son capaces de obtener suficiente oxígeno. Demasiado poco agua significa que la planta puede secarse o morirse.
La hidroponía resuelve este problema de dos maneras diferentes. En primer lugar, el depósito de agua puede ser constantemente oxigenada, asegurándose de que las raíces de la planta obtengan el nivel óptimo de oxígeno. Además, el problema de riego se resuelve por el hecho de que el sistema radicular de la planta ya no tiene suelo que lo rodea y la tierra normalmente suele bloquear de la captación de oxígeno por las raíces.
En segundo lugar, el cultivo hidropónico utiliza mucha menos agua que el cultivo en el suelo ya que el agua puede ser recirculada. En la agricultura tradicional, el agua se vierte sobre el suelo y se filtra en el suelo y la planta apenas utiliza una pequeña fracción del agua. La hidroponía permite que el agua no utilizada se recicle de nuevo en el depósito, listo para su uso en el futuro. En las zonas secas y áridas esto es una ventaja enorme.
La agricultura del futuro
Con todas estas ventajas, parece como si no hay nada de malo en hidroponía! No es del todo cierto. El suelo actúa como un amortiguador de errores en el crecimiento – en hidroponía, los errores son mucho más costosos y pueden arruinar toda una cosecha.
Además, los niveles más altos de humedad invitan a hongos y moho en el sistema, algo que también puede arruinar una cosecha. Sin embargo creemos que se trata de pequeñas desventajas cuando uno las compara por las grandes mejoras que la hidroponía trae en comparación con los métodos tradicionales de cultivo. En los últimos años vemos cada vez más invernaderos hidropónicos comerciales que aparecen en todo el mundo.
En un mundo donde el agua dulce y el suministro de alimentos son temas tan difíciles, puede ser que la hidroponía surja como una forma importante para resolver estos problemas de una manera sostenible y ecológicamente consciente.